“No queremos aprender a matar!!”

CONTRA EL NUEVO SERVICIO MILITAR OBLIGATORIO IMPUESTO ILEGÍTIMAMENTE POR EL GOBIERNO DE MICHELLE BACHELET

Frente a los anuncios realizados el día 4 de abril de 2006 por la Presidenta de la República, Michelle Bachelet; la Ministra de Defensa, Vivianne Blanlot y el Comandante en Jefe del Ejército, Óscar Izurieta en relación al “proceso modernizador” de las FFAA, el cual contempla la aprobación de la Ley 20.045, declaramos:

1. Consideramos que el nuevo Decreto de Ley, el 20:045 de agosto del año 2005, atenta a los Derechos Humanos de la juventud chilena, en cuanto obliga al cumplimiento del Servicio Militar sin posibilidad de considerar como una opción la Objeción de Conciencia.

2. Rechazamos que el nuevo DL no respete el Derecho Humano a la Educación, al obligar al estudiante a entregar tiempo de su proceso formativo a labores ligadas a la milicia. El artículo 30 F de la Ley ofrece tres opciones para el estudiante llamado al reclutamiento:

-“Conscripción ordinaria, en forma inmediata o al término de los estudios correspondientes”, lo cual es un forzamiento ilegítimo a cumplir con una práctica que violenta principios religiosos, filosóficos o éticos de miles de jóvenes chilenos;

-“Prestación, hasta por ciento ochenta días, de servicios vinculados a sus estudios”, lo cual atenta a la vocación de paz con que asumen la orientación de sus estudios gran parte de la juventud, y

-“Participación, hasta por ciento cincuenta días, en cursos especiales de instrucción militar para estudiantes del último año de enseñanza media o de establecimientos de educación superior del Estado o reconocidos por éste”, lo cual violenta la Libertad de Opción de jóvenes que han establecido otros proyectos de vida, truncados por este “deber cívico” ilegítimo e inmoral.

3. El Artículo 42 A afirma que “durante la realización del servicio militar obligatorio, los soldados conscriptos estarán obligados a dar cumplimiento a las órdenes que impartan los superiores y a las prescripciones y mandatos que constituyen la base fundamental del servicio”. Esto continua la lógica que provocó la muerte de los jóvenes en la localidad de Antuco. Es decir, la juventud chilena estará expuesta a mandos militares que han demostrado total irresponsabilidad en sus respectivos cargos.

4. Los jóvenes Humanistas insistimos en la necesidad de transformar el Servicio Militar en una actividad totalmente voluntaria, en un proceso democratizador que contemple la alternativa de un Servicio Civil Voluntario, que oriente los esfuerzos hacia las verdaderas necesidades del país, las cuales no son militares sino sociales.

5. Convocamos a la juventud chilena a converger en un gran Frente por la Vida y la Paz, contra el “deber” de aprender a matar. La unidad de la juventud y las fuerzas progresistas en torno a esta demanda conseguirán detener el accionar de esta Ley, contemplado para el proceso de reclutamiento del año 2007.

¡No Queremos Aprender a Matar!

¡No al Servicio Militar!